Sé que a menudo, estas dos condiciones se entrelazan y pueden ser difíciles de distinguir, pero es fundamental comprender sus diferencias para poder abordarlas de manera efectiva.
Imagínate a María, una mujer que trabaja en ventas, siempre ha sido muy dedicada a su trabajo. Últimamente, ha estado experimentando una sensación constante de agobio y preocupación. Se siente nerviosa la mayor parte del tiempo, tiene dificultades para conciliar el sueño y su mente no deja de dar vueltas a los problemas laborales.
María podría estar experimentando tanto ansiedad como estrés, pero ¿cuál es la diferencia entre ambas? La ansiedad se caracteriza por una sensación persistente de miedo o aprensión, incluso sin una causa específica. Por otro lado, el estrés suele estar relacionado con situaciones concretas que generan presión o tensión en nuestra vida diaria.
¿Cómo puedes identificar si lo que estás sintiendo es ansiedad o estrés? Algunos síntomas comunes de la ansiedad incluyen palpitaciones, sudoración excesiva, dificultad para respirar y pensamientos negativos recurrentes y muy difíciles de manejar, miedo a que algo malo suceda. Por otro lado, el estrés puede manifestarse a través de dolores de cabeza frecuentes, problemas gastrointestinales o cambios en el apetito, y aunque estos sintomas tambien pueden estar presentes en la ansiedad (es más son muy comunes) en el tipo y contenido de pensamiento es donde puedes ver si es ansiedad o estrés.
En el estrés, los pensamientos están más hacia el lado de no alcanzar, de no lograr superar o ser eficiente en esa situación, ya sea laboral o personal, es un sentir que la demanda que tienes te sobrepasa en capacidad, en tiempo o en recursos.
Es importante recordar que tanto la ansiedad como el estrés son reacciones naturales del cuerpo ante situaciones desafiantes. Sin embargo, cuando estos sentimientos se vuelven intensos, constantes y afectan tu calidad de vida, es fundamental buscar ayuda profesional.
Síntomas Clave que Indican que Puede ser Ansiedad
La ansiedad es una respuesta emocional natural que tienes como ser humano, sin embargo también nos referimos a la ansiedad cuando hablamos de un trastorno mental (el cual es muy común) y que puede manifestarse de diversas formas en cada persona. Se refiere a cuando básicamente la respuesta emocional ansiosa ha dejado de ser funcional, ha dejado de ayudarte, para volverse en tu contra.
Uno de los síntomas más comunes de la ansiedad son los ataques de pánico (aunque no se presenta en todos los trastornos de ansiedad), que se caracterizan por una sensación abrumadora de miedo intenso y acompañada por síntomas físicos como palpitaciones, sudoración y dificultad para respirar. Estos ataques pueden tener un disparador o incluso presentarse sin ninguno aparente.
Por su lado en el estrés, los ataques de pánico no son usuales, a menos que presentes estrés crónico y los ataques empiezan a ser desencadenados por situaciones específicas que son estresantes para ti, por ejemplo, si el estrés es de tipo laboral y tu jefe te comunica que ahora lideras un nuevo proyecto, eso puede llegar a convertirse en un desencadenante de un ataque de pánico, si presentas estrés por alguna situación financiera, el que llegue un recibo sobre una deuda con el banco, puede ser el disparador de un ataque de pánico.
El nerviosismo constante es otro indicador importante de ansiedad. Si te encuentras constantemente inquieto, tenso o irritable sin una razón específica, es posible que estés experimentando niveles elevados de ansiedad.
Las preocupaciones excesivas también son un síntoma clave a tener en cuenta. Si te encuentras constantemente preocupado por diferentes aspectos de tu vida, como el trabajo, las relaciones interpersonales o la salud, y estas preocupaciones interfieren con tu día a día, podría ser un signo de ansiedad.
Además, la falta de concentración es común en personas con ansiedad. Puedes notar dificultades para enfocarte en tareas simples o sentirte distraído con facilidad debido a la constante activación mental provocada por la ansiedad.
Casos Clínicos Reveladores: Historias Reales que Distinguen entre Ansiedad y Estrés
Te contaré sobre casos clínicos reales que te ayudarán a diferenciar entre ansiedad y estrés, y no, no es para que te autodiagnostiques… o digas: “bueno estres tenemos todos y pues por eso no hay que ir al psicólogo”. No, no es para eso, es para que le prestes atención y busques ayuda psicológica profesional, tanto si presentas un trastorno de ansiedad como niveles elevados de estrés, se requerirá tratamiento psicológico y desde ese tratamiento se puede hacer mucho por ti!
Miremos el caso de Laura, ella llegó a mi consulta, hace unos meses, se sentía constantemente nerviosa, inquieta y preocupada por el futuro y no por algo específico sino por todo, su mente saltaba de una preocupación a la otra. Sus síntomas físicos: su corazón latía rápido de un momento a otro, tenía grandes dificultades para concentrarse porque se sentía incapaz de parar el torbellino de preocupaciones en su mente y experimentaba problemas para conciliar el sueño, justo al meterse a la cama, llegaban preocupaciones que no podía acallar. Estos síntomas son característicos de la ansiedad, una respuesta emocional intensa y no funcional ante situaciones percibidas como amenazantes.
Por otro lado, te cuento de este otro caso: Marcos, un hombre trabajador y comprometido que se encuentra bajo una presión constante en su trabajo, su empresa ha decidido fusionarse con una empresa multinacional. Se siente abrumado, teme no estar a la altura de los trabajadores con experiencia en el exterior que ahora son sus compañeros de trabajo, se siente irritable y ya ha tenido varias discusiones con su esposa, por cosas que normalmente no discutiria, también se siente agotado física y mentalmente, y en la última cena familiar su hermana le dijo que se veía demacrado. Los últimos meses ha trabajado sin parar, quiere que sus nuevos jefes se den cuenta que él es parte del personal valioso. Estos signos son más representativos del estrés, una reacción del cuerpo frente a demandas excesivas o prolongadas.
¿Si te das cuenta?, es fundamental diferenciar entre ambas condiciones para poder brindar el tratamiento adecuado, pero no te preocupes, de alguna manera este será trabajo del psicólogo clínico a cargo de tu valoración y diagnóstico. No todo es ansiedad, no todo es estrés, y para saber qué estás presentando un proceso de evaluación por un profesional de la salud mental es lo requerido.
Mientras que la ansiedad puede requerir terapias específicas y técnicas de relajación, el estrés puede manejarse con cambios en el estilo de vida y la gestión eficaz de las responsabilidades y también requerir terapia en casos de estrés crónico, o cuando careces de habilidades para crear rutinas saludables, organizar tu tiempo o definir límites.
Consejos Prácticos para Afrontar la Ansiedad o el Estrés
Aprender a manejar la ansiedad y el estrés en tu vida diaria, ¡es fundamental! ¡Así que aquí tienes algunos consejos prácticos que te ayudarán tanto en el estrés o con la ansiedad, mientras buscas la atención psicológica que requieres!
- Respiración Profunda: Una técnica sencilla pero efectiva es la respiración profunda. Tómate unos minutos al día para inhalar profundamente por la nariz, retener el aire unos segundos y luego exhalar lentamente por la boca. Esto ayuda a calmar la mente y reducir los niveles de estrés. Te dejo un video con 4 técnicas de respiración: RESPIRA para reducir tu Ansiedad [FUNCIONA] 🙏🏻🙏🏻🙏🏻
- Práctica de Mindfulness: El mindfulness o atención plena consiste en estar presente en el momento actual, sin juzgar los pensamientos ni las emociones. Dedica unos minutos al día a enfocarte en tus sensaciones sin engancharte en tus pensamiento esto te ayudará a reducir la ansiedad. Te dejo un video de ayuda:Calma tu ansiedad y deja de temer a tus pensamientos (úsala ya y mira los resultados 😎)
- Ejercicio Regular: La actividad física libera endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad. Realizar ejercicio regularmente no solo mejora tu estado físico, sino que también contribuye a reducir el estrés y la ansiedad. Te dejo una meditación en movimiento, haces ejercicio y a la vez un ejercicio de atención plena: Meditación para caminar – YouTube
- Establecer Rutinas Saludables: Mantener una rutina diaria es reconfortante y te ayuda a sentirte en control de ti, entonces incluye en tu semana actividades placenteras y descanso adecuado en tu día a día.
¿Te ha sido útil este blog? Estoy aquí para responder cualquier pregunta adicional que tengas sobre cómo lidiar con la ansiedad y el estrés en tu día a día. Si quieres realizar terapia conmigo haz clic AQUÍ. ¡Cuenta conmigo!